El salafismo es una corriente dentro del islam sunita que tiene varias subcorrientes, entre las cuales se destacan el salafismo purista y el salafismo político.
El salafismo purista se centra en la predicación y la educación, promoviendo una vida personal estricta según los principios islámicos. Los puristas evitan la participación directa en la política y enfatizan la importancia de la obediencia a los gobernantes mientras no interfieran con la práctica religiosa.
El salafismo político busca influir en el sistema político y establecer gobiernos que implementen la ley islámica (sharía). Los salafistas políticos priorizan participar activamente en procesos políticos y electorales en lugar de enfocarse en la educación, creen en la necesidad de reformar las estructuras de gobierno y la legislación para que se alineen con los principios islámicos.